El Día Mundial sin Tabaco se celebra con humo en Paraguay
Los avances que el país había logrado en materia de control del tabaco retrocedieron ante recursos de amparo de tabacaleras y proyectos legislativos. El Senado aún debe decidir sobre una polémica ley.
Por Silvana Molina
silvana@uhora.com.py
Paraguay se une hoy a la celebración mundial del Día Sin Tabaco, con la cabeza baja en materia de avances en el control de esta sustancia, que cada año causa la muerte de más de 700 paraguayos.
Los avances que el país había logrado en materia legislativa, al firmar el Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el Control del Tabaco (en 2003), al ratificarlo mediante ley del Congreso (en 2006) y al aprobar dos decretos que reglamentan algunos de los aspectos más importantes de ese convenio (en 2010), se han hecho humo lentamente.
HUMO SÍ, ADVERTENCIAS, NO. Hoy, en Paraguay, se puede fumar en restaurantes, bares, oficinas cerradas, universidades y transporte público. Aunque el decreto Nº 4.174 del Poder Ejecutivo establece la prohibición de hacerlo en "todos" los lugares cerrados o que sean lugares de trabajo, acciones de amparo interpuestas por tabacaleras han paralizado los controles que podrían hacer cumplir esta normativa.
Hoy, en Paraguay, las cajetillas de cigarrillos carecen de advertencias sanitarias que puedan alertar de manera contundente a los potenciales consumidores -sobre todo a los niños y jóvenes- de los daños a los que se exponen si consumen ese producto.
Numerosos estudios internacionales han probado que estas advertencias con imágenes pueden desalentar el consumo en los jóvenes, evitando que lleguen a convertirse en una de las 6 millones de víctimas fatales que cada año deja el tabaco en el mundo.
Solo una marca de cigarrillos implementa lo que dispone el decreto N.º 4.106 del Ejecutivo, al establecer la obligatoriedad de que los envases de todos los productos de tabaco contengan advertencias sanitarias con imágenes sobre las consecuencias del tabaco.
La normativa especifica que el tamaño de cada advertencia sanitaria debe ocupar el 50 % de la superficie frontal y el 40 % de la superficie posterior de las cajetillas. Recursos de amparo interpuestos por una veintena de tabacaleras y avalados por el Poder Judicial dejaron sin efecto también esta disposición.
LEY POLÉMICA. Sumándose a las acciones que han hecho retroceder los avances obtenidos en materia antitabaco, el año pasado tres senadores -uno de ellos ex ministro de Salud- impulsaron un proyecto que, bajo el nombre de "ley que previene y controla el tabaquismo", echaba por tierra algunas de las directrices más importantes del Convenio Marco para el Control del Tabaco.
El proyecto fue cuestionado por el propio Ministerio de Salud Pública y se ganó el rechazo de numerosos sectores ciudadanos que manifestaron su oposición durante una audiencia pública, a través de las redes sociales, medios de comunicación y mediante comunicados institucionales de las sociedades médicas.
Aun así, el proyecto fue aprobado por ambas cámaras del Congreso el 10 de setiembre del año pasado.
En enero de este año, sin embargo, el Poder Ejecutivo lo vetó y, a mediados de abril, la Cámara de Diputados aceptó ese veto. Ahora, la decisión final está en manos de la instancia donde se originó: el Senado.
Mientras, el Ministerio de Salud Pública ajusta los detalles de otro proyecto de ley con el que busca salvar los vacíos legales existentes. Si llega a tener entrada en el Congreso, dará inicio a un nuevo round en la contienda salud versus tabaco.
MÁS DE 100 QUIEREN DEJAR DE FUMAR
Mientras muchos jóvenes se están iniciando en el consumo de tabaco, fumadores ya adictos buscan la manera de escaparse de él.
Algunos buscan fuerzas en el incentivo económico, como los más de cien que se inscribieron hasta el momento en el concurso Déjalo y Gana, que premia con dinero en efectivo a los fumadores que logren dejar de fumar durante un periodo de un mes.
Se trata de un programa de cesación de consumo de tabaco, aplicado exitosamente a nivel internacional y dirigido a mayores de 15 años.
Los interesados pueden seguir inscribiéndose hasta finales de junio, llamando al teléfono (021) 214-166.
El concurso es organizado por el Programa Nacional de Control del Tabaquismo, en alianza con la Dirección General de Medicina Preventiva del Instituto de Previsión Social y la oenegé Libre del Tabaco
silvana@uhora.com.py
Paraguay se une hoy a la celebración mundial del Día Sin Tabaco, con la cabeza baja en materia de avances en el control de esta sustancia, que cada año causa la muerte de más de 700 paraguayos.
Los avances que el país había logrado en materia legislativa, al firmar el Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el Control del Tabaco (en 2003), al ratificarlo mediante ley del Congreso (en 2006) y al aprobar dos decretos que reglamentan algunos de los aspectos más importantes de ese convenio (en 2010), se han hecho humo lentamente.
HUMO SÍ, ADVERTENCIAS, NO. Hoy, en Paraguay, se puede fumar en restaurantes, bares, oficinas cerradas, universidades y transporte público. Aunque el decreto Nº 4.174 del Poder Ejecutivo establece la prohibición de hacerlo en "todos" los lugares cerrados o que sean lugares de trabajo, acciones de amparo interpuestas por tabacaleras han paralizado los controles que podrían hacer cumplir esta normativa.
Hoy, en Paraguay, las cajetillas de cigarrillos carecen de advertencias sanitarias que puedan alertar de manera contundente a los potenciales consumidores -sobre todo a los niños y jóvenes- de los daños a los que se exponen si consumen ese producto.
Numerosos estudios internacionales han probado que estas advertencias con imágenes pueden desalentar el consumo en los jóvenes, evitando que lleguen a convertirse en una de las 6 millones de víctimas fatales que cada año deja el tabaco en el mundo.
Solo una marca de cigarrillos implementa lo que dispone el decreto N.º 4.106 del Ejecutivo, al establecer la obligatoriedad de que los envases de todos los productos de tabaco contengan advertencias sanitarias con imágenes sobre las consecuencias del tabaco.
La normativa especifica que el tamaño de cada advertencia sanitaria debe ocupar el 50 % de la superficie frontal y el 40 % de la superficie posterior de las cajetillas. Recursos de amparo interpuestos por una veintena de tabacaleras y avalados por el Poder Judicial dejaron sin efecto también esta disposición.
LEY POLÉMICA. Sumándose a las acciones que han hecho retroceder los avances obtenidos en materia antitabaco, el año pasado tres senadores -uno de ellos ex ministro de Salud- impulsaron un proyecto que, bajo el nombre de "ley que previene y controla el tabaquismo", echaba por tierra algunas de las directrices más importantes del Convenio Marco para el Control del Tabaco.
El proyecto fue cuestionado por el propio Ministerio de Salud Pública y se ganó el rechazo de numerosos sectores ciudadanos que manifestaron su oposición durante una audiencia pública, a través de las redes sociales, medios de comunicación y mediante comunicados institucionales de las sociedades médicas.
Aun así, el proyecto fue aprobado por ambas cámaras del Congreso el 10 de setiembre del año pasado.
En enero de este año, sin embargo, el Poder Ejecutivo lo vetó y, a mediados de abril, la Cámara de Diputados aceptó ese veto. Ahora, la decisión final está en manos de la instancia donde se originó: el Senado.
Mientras, el Ministerio de Salud Pública ajusta los detalles de otro proyecto de ley con el que busca salvar los vacíos legales existentes. Si llega a tener entrada en el Congreso, dará inicio a un nuevo round en la contienda salud versus tabaco.
MÁS DE 100 QUIEREN DEJAR DE FUMAR
Mientras muchos jóvenes se están iniciando en el consumo de tabaco, fumadores ya adictos buscan la manera de escaparse de él.
Algunos buscan fuerzas en el incentivo económico, como los más de cien que se inscribieron hasta el momento en el concurso Déjalo y Gana, que premia con dinero en efectivo a los fumadores que logren dejar de fumar durante un periodo de un mes.
Se trata de un programa de cesación de consumo de tabaco, aplicado exitosamente a nivel internacional y dirigido a mayores de 15 años.
Los interesados pueden seguir inscribiéndose hasta finales de junio, llamando al teléfono (021) 214-166.
El concurso es organizado por el Programa Nacional de Control del Tabaquismo, en alianza con la Dirección General de Medicina Preventiva del Instituto de Previsión Social y la oenegé Libre del Tabaco
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