Respire con tranquilidad: Venezuela será libre de humo
Según resolución publicada en Gaceta Oficial, los dueños de establecimientos deberán ajustarse a la norma en un plazo no mayor de 90 días. A partir del 3 de junio entra en vigencia la medida del Ministerio de Salud.
Antonio Vizcaya Loreto
Tal y como se conoce que los derechos de una persona terminan donde comienzan los de otra, la ciudadanía venezolana “fumadora”, así sea por la fuerza, tendrá que dejar guardados los cigarrillos y encendedores en sus bolsos.
Reacciones neutras, otras a favor y en contra, prevalecen en el ambiente. Lo cierto es que los lugares públicos cerrados, locales y oficinas de trabajo se deberán ajustar a la nueva norma y desplegar carteles en los que se decreta como espacios libres de humo.
Ya no existirán las zonas para fumadores y es la concienciación de los ciudadanos el primer factor a atacar por parte del Ministerio de Salud. Según lo reseña en el portal online de El Nacional, la principal representante de esta cartera, Eugenia Sader, explicó que los establecimientos tendrán 90 días para adaptarse a la regla; de no hacerlo, podrán ser sancionados.
Ya en Margarita y en otras ciudades del país se vivencian experiencias exitosas en algunos centros comerciales, sin embargo, tras normar los lugares en los que no se puede fumar, se refirma la defensa a las personas que de manera indirecta resultan ser fumadores pasivos.
El gerente general del centro comercial Sambil Margarita, Guido Centésimo, manifestó que desde hace cinco años ellos han adoptado una política que establece que sus espacios son 100% libres de humo.
Aplicaron esto tras observar conductas en otros países latinoamericanos, especialmente en Argentina, donde los centros comerciales ya establecieron la medida, al destinar ambientes libres de contaminación para que los visitantes tengan la libertad de sentirse cómodos y no ser afectados por fumadores.
“Captamos la atención de la gente muy a favor de las zonas libres de humo, pese a algunas limitaciones en los restaurantes que posteriormente se solucionaron”, comentó el gerente.
“Disculpe, señor, ¿usted podrá apagar su cigarrillo?”, le sugiere con amabilidad un efectivo de seguridad del Sambil a una persona que se paseaba fumando en los pasillos.
Este gesto gentil, en muchos de los casos, opaca la rabia e incomodidad con la que podría haber reaccionado el fumador. Pero al contrario, sonrió y se dirigió a la parte de afuera para terminar de quemar su tabaco recién encendido.
Centésimo comentó que esta estrategia ha sido utilizada hasta por él mismo y las personas, a pesar de la molestia, han sido receptivas.
Tomado de:
http://www.elsoldemargarita.com.ve/Noticias.aspx?NoticiaId=75360&SeccionId=1
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