Beijing propone nuevos reglamentos para luchar contra el tabaquismo entre los adolescentes
BEIJING, 20 feb (Xinhua) -- La capital china de Beijing elaborará una nueva normativa para reforzar la implementación de la actual prohibición de fumar, en respuesta a unas estadísticas recientes que demuestran una elevada tendencia entre los adolescentes de probar el tabaco y críticas de expertos en Salud Pública por la floja aplicación de esta interdicción.
"La prohibición de fumar en lugares públicos emitida por el Ministerio de Salud Pública en mayo casi no ha tenido efecto porque no especifica castigos para aquellos que la infringen", indicó Suo Chao, hablando en nombre de la Asociación para el Control del Tabaco de China, que recientemente realizó una encuesta sobre el tabaquismo entre unos 40.000 estudiantes de todo el país.
De acuerdo con los resultados del estudio, un 15,8 por ciento de alumnos de escuelas secundarias fuma con regularidad mientras que un 22,5 por ciento consideraría probarlo.
Los adolescentes de edades comprendidas entre los 12 y los 14 años están especialmente desprotegidos, pues más del 26 por ciento de ellos considera probar el tabaco, indicó Suo.
"Tenemos que tomar medidas cuanto antes para proporcionar un entorno libre de tabaco y ayudar a los adolescentes a dejar este hábito tan perjudicial", dijo la semana pasada Huang Jiefu, viceministro de Salud Pública, durante el lanzamiento de un proyecto piloto para eliminar el tabaquismo en las escuelas, en Beijing.
A su entender, los menores de edad, que son menos seguros de sí mismos, son más propensos a ser seducidos por los cigarrillos, en comparación con los adultos. Además, "como más temprano se empieza, más difícil es dejarlo", según Huang.
Como mayor productor y consumidor de tabaco del mundo, China tiene más de 300 millones de fumadores y otros 740 millones de personas están expuestos al humo de segunda mano. Cada año, alrededor de 1,2 millones de chinos mueren víctimas de enfermedades relacionadas con el tabaco, añadió Huang.
De acuerdo con la asociación mencionada, cada vez más jóvenes empiezan a fumar por causa de la escasez de ambientes libres de humo y la falta de una dura implementación de los reglamentos pertinentes.
"La lucha contra el tabaco es una tarea a largo plazo", subrayó Suo.
En un esfuerzo por endurecer el control del tabaco en la capital, las autoridades incluirán una nueva prohibición en las regulaciones municipales de Beijing.
Además, la agenda legislativa municipal ahora también incluye nuevas medidas que ilegalizan el tabaco y se concentran en la aplicación de la prohibición, dijo Zhang Yin, director de la oficina de asuntos jurídicos del Congreso Popular Municipal de Beijing.
Una vez aprobado el nuevo reglamento se cancelarán las normas de prohibición actuales, de acuerdo con Zhang.
Los expertos también ofrecieron sugerencias acerca de cómo implementar mejor la ley.
Ying Songnian, profesor de derecho administrativo de la Universidad de Ciencias Políticas y Derecho de China, quien condujo la investigación, señaló que es preciso incluir en los nuevos reglamentos el establecimiento de mayores zonas libres de humo.
"Una medida eficiente a la hora de controlar el tabaquismo es nombrar a un responsable especial que supervisa los lugares de trabajo", apuntó Ying.
Por ejemplo, un restaurante puede designar a un camarero en concreto para recordar a los clientes que están violando la ley. Si el cliente no obedece, ese camarero puede avisar a las autoridades locales o departamentos de protección ambiental, indicó Ying.
Feng Yongfeng, fundador de una organización no gubernamental de protección del ambiente, también recomendó que los departamentos de salud o ambiente establezcan una línea telefónica de acceso directo para atender a las denuncias de la ciudadanía.
"La implementación de la normativa requiere los esfuerzos de cada ciudadano, no sólo del gobierno", recalcó.
"Además, los restaurantes también pueden instalar aparatos de detección de la calidad del aire a fin de controlar el humo con más claridad", añadió Feng.
Según la Organización Mundial de la Salud, la población fumadora del mundo alcanza los 1.250 millones de personas. Casi seis millones de personas mueren por enfermedades relacionadas con el tabaco cada año, cifra que aumentará a ocho millones en 2030 si la tendencia continúa.
"La prohibición de fumar en lugares públicos emitida por el Ministerio de Salud Pública en mayo casi no ha tenido efecto porque no especifica castigos para aquellos que la infringen", indicó Suo Chao, hablando en nombre de la Asociación para el Control del Tabaco de China, que recientemente realizó una encuesta sobre el tabaquismo entre unos 40.000 estudiantes de todo el país.
De acuerdo con los resultados del estudio, un 15,8 por ciento de alumnos de escuelas secundarias fuma con regularidad mientras que un 22,5 por ciento consideraría probarlo.
Los adolescentes de edades comprendidas entre los 12 y los 14 años están especialmente desprotegidos, pues más del 26 por ciento de ellos considera probar el tabaco, indicó Suo.
"Tenemos que tomar medidas cuanto antes para proporcionar un entorno libre de tabaco y ayudar a los adolescentes a dejar este hábito tan perjudicial", dijo la semana pasada Huang Jiefu, viceministro de Salud Pública, durante el lanzamiento de un proyecto piloto para eliminar el tabaquismo en las escuelas, en Beijing.
A su entender, los menores de edad, que son menos seguros de sí mismos, son más propensos a ser seducidos por los cigarrillos, en comparación con los adultos. Además, "como más temprano se empieza, más difícil es dejarlo", según Huang.
Como mayor productor y consumidor de tabaco del mundo, China tiene más de 300 millones de fumadores y otros 740 millones de personas están expuestos al humo de segunda mano. Cada año, alrededor de 1,2 millones de chinos mueren víctimas de enfermedades relacionadas con el tabaco, añadió Huang.
De acuerdo con la asociación mencionada, cada vez más jóvenes empiezan a fumar por causa de la escasez de ambientes libres de humo y la falta de una dura implementación de los reglamentos pertinentes.
"La lucha contra el tabaco es una tarea a largo plazo", subrayó Suo.
En un esfuerzo por endurecer el control del tabaco en la capital, las autoridades incluirán una nueva prohibición en las regulaciones municipales de Beijing.
Además, la agenda legislativa municipal ahora también incluye nuevas medidas que ilegalizan el tabaco y se concentran en la aplicación de la prohibición, dijo Zhang Yin, director de la oficina de asuntos jurídicos del Congreso Popular Municipal de Beijing.
Una vez aprobado el nuevo reglamento se cancelarán las normas de prohibición actuales, de acuerdo con Zhang.
Los expertos también ofrecieron sugerencias acerca de cómo implementar mejor la ley.
Ying Songnian, profesor de derecho administrativo de la Universidad de Ciencias Políticas y Derecho de China, quien condujo la investigación, señaló que es preciso incluir en los nuevos reglamentos el establecimiento de mayores zonas libres de humo.
"Una medida eficiente a la hora de controlar el tabaquismo es nombrar a un responsable especial que supervisa los lugares de trabajo", apuntó Ying.
Por ejemplo, un restaurante puede designar a un camarero en concreto para recordar a los clientes que están violando la ley. Si el cliente no obedece, ese camarero puede avisar a las autoridades locales o departamentos de protección ambiental, indicó Ying.
Feng Yongfeng, fundador de una organización no gubernamental de protección del ambiente, también recomendó que los departamentos de salud o ambiente establezcan una línea telefónica de acceso directo para atender a las denuncias de la ciudadanía.
"La implementación de la normativa requiere los esfuerzos de cada ciudadano, no sólo del gobierno", recalcó.
"Además, los restaurantes también pueden instalar aparatos de detección de la calidad del aire a fin de controlar el humo con más claridad", añadió Feng.
Según la Organización Mundial de la Salud, la población fumadora del mundo alcanza los 1.250 millones de personas. Casi seis millones de personas mueren por enfermedades relacionadas con el tabaco cada año, cifra que aumentará a ocho millones en 2030 si la tendencia continúa.
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