El consumo de cigarrillo no sólo aumenta las posibilidades de desarrollar un cáncer de pulmón sino también de vejiga.
Un reciente estudio realizado por el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos reveló que aunque la tasa de fumadores en las últimas décadas ha descendido, la incidencia del cáncer de vejiga se ha mantenido estable, con unos 350 mil nuevos diagnósticos al año en el mundo.
RCN La Radio consultó con Nelson Páez, Coordinador del Comité de Tabaquismo de la Asociación Colombiana de Neumología, quien explicó que los riesgos de fumar han aumentado por que la composición de los cigarrillos ha cambiado, “ahora tienen muchos tóxicos que suavizan su sabor y mejoran la tolerancia, pero tienen una alta concentración de carcinógenos”.
Sobre el estudio, el neumólogo coincidió con los investigadores estadounidenses en que ha aumentado el riesgo de tener este tipo de cáncer.
“Se consideraba que las personas que tenían antecedente de fumar, especialmente mujeres, tenían un riesgo aumentando, casi el doble, de tener cáncer de vejiga comparado con la población general. Ahora creemos que puede ser casi como 4 veces”, señaló Páez.
El especialista añadió que otro dato aún más preocupante es que aunque se deje de fumar siempre quedará un riesgo superior, al de la población general, de padecer cáncer de vejiga.
Es decir, los estudios ponen en evidencia que “no hay ningún órgano que no se vea afectado por el consumo de cigarrillo”.
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