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miércoles, 7 de septiembre de 2011

Milenio.com. Ciudad de México, 7 de septiembre de 2011


Destinan familias pobres hasta 20% de sus ingresos en tabaco

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Solicitan al presidente Felipe Calderón incluir un impuesto extra a las cajetillas de cigarros, debido a que por cuatro enfermedades derivadas del tabaquismo se gastan hasta 45 mil millones de pesos al año.
Ciudad de México • El Instituto Nacional de Salud Pública informó que los hogares donde priva la pobreza extrema gastaron durante 2010 alrededor de 485 millones de pesos en la compra de cigarros, un gasto que está por encima de lo que se destina a necesidades básicas como alimentación, vestido, educación y salud.
Al presentar el estudio “El vinculo entre el tabaquismo y la pobreza en México”, Luz Myriam Reynales, jefa del departamento de investigación de tabaquismo del INSP, detalló que 11.3 por ciento de los adultos en pobreza extrema destinan un promedio mensual de 211 pesos a la compra de cajetillas de cigarros, o bien a la adquisición de unidades de tabaco que pagan cuatro veces más caros, cuando con ese dinero podrían erradicar la hambruna y falta de educación básica en sus comunidades.
El estudio, basado en las repercusiones del consumo del tabaco en la distribución de los ingresos por hogar, consideró que con 211 pesos mensuales, el sector más pobre del país podrá comprar 20 litros de lecha pasteurizada, o bien, 13 kilos de huevo, 23 kilos de frijol, 13 kilos de harina de maíz, 16 kilos de lenteja, 22 latas de atún y 13 de sardina.
Sin embargo, el presupuesto que destinan a tabaquismo, que oscila en 5.5 por ciento de su ingreso mensuales, está por encima de lo que invierten en vestido y calzado gastan 4.2 por ciento, salud 2.1 por ciento y educación 4.7 por ciento.
De acuerdo con Jesús Felipe González Roldán, vicepresidente y fundador de la red México sin Tabaco, de los 19 millones de pobres extremos que registran los últimos censos se en el país, por lo menos 4.5 millones fuman de manera cotidiana, ya sea que compren cajetillas a 38 pesos o bien unidades de hasta 4 pesos (cuando en promedio una de 20 vale 1.60 cada uno) , lo que redunda aún más en empobrecimiento,
González Roldán precisó que en la encuesta, levantada por INSP, se consideraron a 80 millones de mexicanos que fueron clasificados en los cinco declles socioeconómicos, es decir, desde el pobre extremo, pobre con alguna carencia clase media y meda lata, y ricos. Simplemente entre los dos primeros niveles se ubican 32 millones de habitantes de los 50 millones que, de acuerdo con cifras oficiales, sufren a pobreza y, a su vez gastos catastróficos ya que además de perder poder adquisitivo se enferman de padecimientos crónicos, como cáncer, infartos, embolias, enfisema.
Pero además, añadió, de los aproximadamente 5.6 millones de familias afiliadas a programas como Oportunidades y 70 y Más, hasta 2 millones destinan parte del presupuesto a la compra de cigarros y alcohol, por lo que se debe de hacer un blindaje legal en la entrega de este tipo de apoyos para que únicamente cubran necesidades básicas, educación y alimento.
En conferencia de prensa, la Red México sin Tabaco, la Fundación Interamericana del Corazón, la ONG Códice y el INSP aclararon que el sector que más fuma es el de los ricos, con 19.3 por ciento de prevalencia (que invierte 1% de su gasto mensual, superior a los 16 mil y hasta 100 mil); sin embargo, el impacto de empobrecimiento es mayor entre los que ganan menos de mil 200 pesos mensuales porque supera el 20 por ciento de sus recursos.
Ante esa situación, hicieron un llamado para que en el anteproyecto del presupuesto de egresos de la Federación, que se entrega el 8 de septiembre, se incluya un impuesto adicional a las cajetillas de cigarros, para que su costo sea mayor a los 40 pesos y con ello se eviten 45 mil millones pesos en gasto en el tratamientos de enfermedades crónicas provocadas por la adicción y 60 mil muertes anuales.
La recaudación reciente por un impuesto de 7 pesos adicionales significó una recaudación de mil 140 millones de pesos, es decir, lo equivalente al presupuesto de 188% asignado al IPN; 64% a Presidencia; 25% SCJN; 18% UNAM; 10% poder legislativo; 9% Seguro Popular y 8% Conacyt.
En México se venden 2 mil 500 cajetillas anuales, y entre la población estudiada representa una inversión general de 6 mil 362 millones de pesos. “La tabacaleras argumentaban con el impuesto adicional de siete pesos subiría el contrabando, cuando este, de acuerdo con cifras oficiales se ubica hasta ahora en 30 millones de cajetillas confiscadas, aquí el problema es la venta de cigarros sueltos, que se venden cuatro veces más caros y que representan un desvío de pago de impuestos”, aseveró González Roldán.
La epidemia del tabaquismo, agregó Luz Myriam Reynales, afecta en términos generales al 25.1 % de la población de varones y al 7.7 de mujeres. Los que diario fuman son el 7.6% de los mexicanos, de 13 a 65 años, siendo las ciudades más consumidoras Campeche, La Paz, Morelia y Pachuca,
En la investigación se comprobó también que ente las familias pobres que no fuman hay mayor calidad de vida y oportunidades de desarrollo. “Si estos sectores, los más pobres, dejaran de fumar se erradicaría la pobreza extrema y se obtendría educación universal”, precisó Reynales.
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