Los Ángeles se suma a la prohibición del cigarro electrónico
Los Ángeles se ha sumado a la lista de los lugares donde el cigarrillo electrónico será tan perseguido como el tabaco en general, prohibido a partir de ahora en parques, restaurantes y en la mayoría de los lugares de trabajo. No importa que una mayoría de sus usuarios lo perciba como una especie de cigarrillo falso y una manera de dejar de fumar. Las autoridades de la ciudad del sur de California lo entienden como un aparato que puede incitar a jóvenes y adultos a ponerse a fumar.
Alegan además que desconocen los efectos que pueda tener el humo que desprende el aparato y que contiene nicotina, una decisión que coincide con el aumento en popularidad de los cigarrillos electrónicos, disponibles en todo tipo de sabores.
El concejo de la ciudad de Los Ángeles, tras un acalorado debate, aprobó la medida, que en unas semanas obligará a los consumidores de este nuevo tipo de cigarrillo a someterse al mismo régimen que los fumadores de tabaco. Es decir, a fumar en la calle si están en un restaurante o un bar, o salirse fuera del edificio en el caso de las oficinas.
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